"Las tres velas" - Joaquín Sorolla - 1903 - Colección privada
El Palau de les Arts Reina Sofía de Valencia estrena el próximo día 24 de abril la ópera Maror, compuesta por el valenciano Manuel Palau Boix (1893-1967). No será la primera ocasión en que este auditorio operístico represente una obra de un compositor valenciano, pero sí será la primera vez que se interprete en el mismo una ópera escrita en lengua valenciana.
Aprovechando el acontecimiento, la inefable Consellera Catalá nos está obsequiando estos días con una serie de declaraciones que a muchos nos están ruborizando. Para empezar, está diciendo que Maror representa “un punto de inflexión en el Palau de les Arts”y que, a partir de ahora, se planea programar una ópera valenciana al año. No se crea que se está usted inventando nada, señora Consellera. En las primeras temporadas de Les Arts era habitual la programación de óperas de Martín i Soler.
También ha dicho Cataláque este estreno es “la gran cita de la ópera de este año”. La imbecilidad es de marca mayor, aun dando por hecho que se esté refiriendo sólo al Palau de les Arts y no a la programación operística a nivel mundial, porque, sin desmerecer el interés que pueda suscitar Maror, es un chiste de mal gusto compararla con Traviata, Valquiria, Simon Boccanegra y hasta con L’italiana in Algeri.
Dice la Consellera también que esta es la mejor forma de cerrar la temporada (mujer, a mí se me ocurre un centenar, al menos, de mejores alternativas) y que esto demuestra la “fortaleza y tenacidad de la institución cultural”. Mire usted, ahí sí vamos a coincidir, porque que el Palau de les Arts esté sobreviviendo a todas las zancadillas que ustedes están poniendo, demuestra su fortaleza e induce a ser optimista.
Y ya sólo faltaba que se aludiera al patrioterismo barato, mencionando, como se ha hecho, la “defensa de lo nostre”, el “giro patriótico” de Les Arts o majaderías por el estilo que lo único que revelan es que pretende usted mezclar churras con merinas y utilizar la programación operística para ondear la bandera de la valencianía (su valencianía) con fines políticos. Allá usted. Jugar a la política de bajo nivel con la educación o la cultura, dice muy poco a su favor como gestora cultural y como representante política de la ciudadanía, señora Consellera.
Y Cataláno ha sido la única en decir bobadas, que los de Culturarts hacer bien las cosas no sé si las harán, pero a cursis, cuando se ponen, no les gana nadie. Así, hemos tenido que escuchar a su director general, Manuel Tomás, calificara Manuel Palau de “el Sorolla de la música valenciana”, como si de un combatiente de lucha libre se tratara (“el rompehuesos de Massamagrell”). Piensan que el público valenciano debe ser lelo y si no le hablas de Sorolla (que debe ser el único personaje valenciano popular que conocen ellos junto a Albelda) no se va a entender la importancia del compositor.
Pero bueno, dejando de lado la idiocia gubernativa, siempre es un acontecimiento interesante poder descubrir una nueva ópera y dar a conocer la obra de un músico sin duda relevante como fue Manuel Palau.
Manuel Palaunació en 1893 en la localidad de Alfara del Patriarca, en el seno de una familia donde la afición a la música estaba presente, aunque profesionalmente se dedicaban al negocio del comercio de aceite de oliva. En 1914, Palau ingresó en el Conservatorio de Valencia, donde apenas cinco años después ya formaría parte de su profesorado. Sus viajes a París le pusieron en contacto con importantes músicos de la época que influirían de forma clara en sus composiciones, como Maurice Ravel o Charles Koechlin.
Tiene Palauuna vasta y variada producción musical, de la que posiblemente su obra más interpretada sea la conocida Marcha burlesca, y entre la que podemos encontrar desde piezas sinfónicas, instrumentales, composiciones para banda, canciones, zarzuelas o esta ópera, Maror, cuyo estreno en el Palau de les Arts el próximo día 24 constituirá la primera representación escenificada de esta obra desde que fuera compuesta en 1956. Únicamente se había interpretado antes en una ocasión, en mayo de 2002, también en Valencia, esta vez en el Palau de la Música , pero en versión concierto.
Recién comenzada la década de los 50 del pasado siglo, Manuel Palau encarga al poeta valenciano Xavier Casp(1915-2004) el libreto para una ópera. Casp, defensor por entonces de la unidad lingüística de valenciano y catalán, escribe el texto de Maror en un valenciano del que, años después, reconvertido en uno de los principales abanderados del secesionismo lingüístico, renegaría, y a punto estuvo de dar al traste con el estreno de la obra en 2002, por sus intentos de readaptar el libreto.
Tres años (1953-1956) le llevaría a Palau finalizar la partitura de Maror, coincidiendo con uno de sus periodos de mayor creatividad. La obra, como gran parte de las composiciones de Manuel Palau, presenta rasgos que permiten vislumbrar la influencia de la música impresionista francesa de principios del siglo XX, así como de la música popular valenciana, pudiendo identificarse temas y melodías de su folclore entre el colorido y la riqueza armónica y orquestal de una partitura en la que tampoco faltan notas comunes con el estilo de otros compositores españoles como Falla, Granados o Albéniz.
No se caracteriza Maror por tener especiales momentos de lucimiento para los solistas vocales y, si bien algunos papeles como el de Rosa tienen una gran exigencia, no hay arias propicias para la pirotecnia del gorgorito, ni tampoco cuenta con melodías particularmente pegadizas, aunque sí hay interesantes intervenciones del coro e instantes de íntimo lirismo, como el concertante final del segundo acto, uno de los pasajes más logrados de la partitura.
La obra obtendría en 1966 el Premio Joan Senent otorgado por la Caja de Ahorros y dotado con 100.000 pesetas, pero ni ese premio ni las dos ocasiones (1927 y 1945) en las que Manuel Palau fue galardonado con el Premio Nacional de Música, bastaron para conseguir que, en vida del compositor, pudiese estrenarse esta ópera, de la que él declaraba sentirse especialmente orgulloso.
La versión que podremos ver en Les Arts a partir del día 24 contará con la dirección musical del valenciano Manuel Galduf, quien, precisamente, fue discípulo de Manuel Palau, y que debutará en el foso al frente de la Orquestra de la Comunitat Valenciana.
La dirección escénica también es responsabilidad de otro valenciano, Antonio Díaz Zamora, quien con la colaboración de la escenografía de Manuel Zuriaga, el vestuario de Miguel Crespí y la iluminación de Carles Alfaro han preparado una propuesta que han calificado como “conceptual” e inspirada en el neorrealismo italiano, con referencias marineras dominando la escena y habiendo realizado una intensa labor de documentación sobre la época en la que se ambienta.
Contaremos también con la presencia del Cor de la Generalitat y de la Escolania de la Mare de Déu dels Desemparats, y el reparto de solistas vocales está integrado por cantantes valencianos: Minerva Moliner (Rosa), Sandra Ferrández (Teresa), Javier Palacios (Tonet), Josep Miquel Ramon (Toni), Cristina Faus (Maria), Bonifaci Carrillo (Tío Estrop), Boro Giner (Marinero) y Yolanda Marín (Voz interior); así como la mallorquina María Luisa Corbacho (Anna).
Bueno, pues como decía antes, dejando de lado las siempre desafortunadas intervenciones de nuestros responsables culturales, la cita con esta ópera es un acontecimiento que vale la pena disfrutar, sobre todo si, como es el caso, presenta unos rasgos musicales interesantes y puede ser el vehículo para dar a conocer las voces de unos jóvenes intérpretes que, sin duda, merecían esta oportunidad.
Por eso, desde este blog os animo a asistir a alguna de las representaciones de Maror que tendrán lugar en el Palau de les Arts los próximos días 24, 27 y 30 de abril. Y luego podéis pasar por aquí y decir qué os ha parecido.
No tenía pensado ir pero después de leerte me uno a la causa.
ResponderEliminarMe alegro, Kiko. Espero que no salgamos demasiado defraudados.
EliminarHola Atticus y demás adictos a la Ópera:
ResponderEliminarLo primero es darte la enhorabuena, ya que me encanta tu blog.
Es la primera vez que escribo, pero espero poder ser de ayuda para aclarar cosas sobre nuestro querido Palau de les Arts, ya que vivo de cerca cada día lo que allí ocurre.
En lo que nos atañe hoy (Maror) he de decir que casi todo se ha hecho "alla Spagnola" .
Para variar, los politiquillos de turno se han emperrado con ello, y me parece bien, ya que se han gastado millones en ese edificio,que menos que se represente alguna ópera local, pero han aprovechado la ocasión para devolver favores a los patéticos personajes musicales locales, véase el reparto o el maestro.
por no hablar que las partituras están llenas de errores de imprenta que no se han querido revisar antes de los ensayos,con lo cual se usaron estos para corregirlos y no para lo que tienen que ser los ensayos, por cierto se escucharán errores el día del estreno...
La música de Palau en esta Ópera es aceptable,pero es una lástima que ya que se hace tenga a un batutero de banda de verbena y un elenco...!!!! Llevo semanas soñando con tu crítica post-estreno,te recomiendo que no alejes mucho tu famoso Fortasec...
Lo que se ve venir es la peor producción de la historia de Les Arts con diferencia, y con esto no animo a la deserción, todo lo contrario, es una ocasión única para poder ver el estreno mundial de una ópera de alguien de nuestra tierra y tambien lo es para que los aficionados muestren su desaprobación con lo que no le haya gustado.
Os seguiré informando.
Gracias por la información. Lo cierto es que me has dejado con la moral por los suelos. No es que espere demasiado de esta Maror, pero al menos tenía confianza en los solistas y en la orquesta y coro, claro.
EliminarAl batutero ya le conocemos, es lo que hay, pero si tampoco están ensayando, mala marcha.
Te agradecería que nos siguieses dando tus informaciones.
Yo ya contaré mi opinión del estreno.
Un saludo,
Pues yo tengo que reconocer que me siento incapaz de ir, no puedo soportar tanto "chovinismo" y con tanto mediocre... que la vean Catalá y sus esbirros.
ResponderEliminarEduardo.
La campaña de la gentuza esta es intolerable, pero pienso que eso no debería impedirnos conocer mejor una obra nueva que, seguro, algún rasgo interesante presentará.
EliminarAnda que si en mi tierra alguno de los de la Junta (PSOE) abriera el hocico para decir que se están pensando programar cada año en el Maestranza una ópera de autor andaluz...
ResponderEliminarPues eso mismo Fernando... Sólo hay que pensar en qué hubiera pasado si lo mismo lo hubieran hecho otros para darse cuenta de la majadería, especialmente trascendente en la situación critica que vive Les Arts.
EliminarHola Atticus, enhorabuena por tus análisis¡¡¡¡ también es la primera vez que escribo. Estoy fuera y no podré ver la representación, esperaré las críticas. A mi me parece bien que por lo menos y de vez en cuando con el dinero de todos los valencianos se representen trabajos de calidad de compositores valencianos, No por el hecho de ser valenciano es suficiente, el trabajo debe tener calidad. Y creo que Manuel Palau y Maror merecen una oportunidad.
ResponderEliminarWagner, Puccini, Verdi no requieren grandes inversiones para que sean conocidos. . Que se conozcan los compositores valencianos olvidados eso sí y también los nuevos compositories valencianos que triunfan por el mundo y aqui no les damos oportunidades, Todo eso es merecedor de inversiones con dinero de todos los valencianos. Esperemos que el Palau no se tome "medio en broma" esta representación y haga una producción por lo menos acorde con las que hace siempre, lo contrario sería menospreciarnos a todos. Los objetivos de la cultura no son unicamente llenar los teatros, hay otros objetivos que se deben alcanzar.
Bueno es mi humilde opinión....
gracias a tod@s por vuestros comentarios
Yo también pienso que Palau y Maror merecen una oportunidad, pero no por que haya que tener un "cupo valenciano". Creo que eso es un error que puede pagarlo el propio teatro con la huida del público habitual.
EliminarDe todas formas, primero veamos y luego juzgaremos.
Gracias por tu comentario.
¡Hola! Atticus. Gracias, como siempre, por tus comentarios. Me reservo a tu crítica del día 24, en función de ella acudiré o no. He ido a todas las representaciones de ésta temporada, pero después de las declaraciones del bicho de la Català, se me están yendo las ganas de ir. Tu tienes la palabra.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hombre, no me pongas en ese brete... Mi opinión no dejará de ser eso, mi particular opinión que no tiene por que condicionar el disfrute o rechazo de un espectáculo. Mi consejo siempre es ir a la ópera y luego opinar libremente, independientemente de lo que digan los listillos y Atticus de turno.
EliminarUn saludo,
Mil gracias por tu contestación Atticus, No está mal es debate que propicias Atticus¡¡¡¡¡¡ nos hace falta en nuestro querido Palau de les Arts, y creo que sus responsables deben asumir riesgos, así lo hizo Mortier de manera brillante en Madrid. Maror es un riesgo para el público valenciano al que ya es dificil que asista a un Wagner¡¡¡¡ estamo instalados en una cómoda zona de Verdi, Mozart y Puccini, tenemos que crecer "operísticamente" e ir educando al público valenciano en otras propuestas que generen interés, debate, y porque no polémica sana. Es el objetivo del arte y la música. Y que nuestros políticos opinen pues mejor aunque digan alguna tontería y obviedad, mejor eso que pasen de todo aunque como digo nos hagan sonrojar de vez en cuando. Exijamosle que garanticen la pervivencia del Palau y su propuesta cultural....Y respecto a la huida de público, eso sí que es un importante reflexión Atticus, hay que buscar nuevos públicos además de fidelizar a los de siempre, que por cierto no son tantos en Valencia. Asumir riesgos para crecer, de manera controlada siempre. Animaría a nuestra Intendente a que así lo hiciera. Espero con interés tu valoración sobre Maror, no podré ir y lo siento mucho, enhorabuena de nuevo,
ResponderEliminarNuestra Intendente estaría encantada de asumir riesgos. Ella siempre ha apostado por una programación que compaginase el gran repertorio con otras propuestas mas minoritarias pero siempre con el denominador común de la exigencia de calidad.
ResponderEliminarEl problema es que la falta de presupuesto ha llevado a tener que centrarse en el repertorio mas popular. Por eso no tiene sentido que los.mismos que recortan la aportación económico defiendan ahora una propuesta de obligado cupo valenciano anual que económicamente tiene garantizado el fracaso. Contradicciones de nuestra querida Consellera.
¿Cuántas óperas -que no sean en versión concierto- ha dirigido el señor Galduf? Es una duda que tengo. ¿Sabe que de vez en cuando hay que levantar la vista de la partitura? Otra duda. Del profesor de oboe y su querida alumna prefiero no hablar.
ResponderEliminarNo te cortes, habla, habla...
EliminarA mi em sembla molt bé la iniciativa, independentment que se li podrien haver posat els mateixos mitjans humans i materials que a les altres produccions. Precisament, si la consellera pensa que és tan important, i que és nostra, és quan més s'hauria d'haver implicat. Per altra banda, el Liceu tots els anys programa l'opera d'un autor català (en català, castellà o italià) i manté una política d'equilibri entre estils, èpoques i orígens de les obres, i el seu èxit el prova que el director artístic del Liceu, Andreu Matabosch, ha sigut fitxat pel Teatro Real de Madrid. Ni s'ha de ser chauvinista ni tindre tant de fals cosmopolistisme interessat. Una òpera valenciana cada any i que siga la millor producció de la temporada, per què no? L'interés consisteix en la raresa i si es descobreix que val la pena, tindrà una oportunitat d'entrar en els repertoris. Alguns pareix que voldrien La traviata i La Bohème totes els anys.
ResponderEliminarestic totalment d'acord. Vinc de vore Maror i m'ha quedat impressionat per la música, crec que és una obra maestra, sense lloc a dubtes. L'orquestra lo millor de tot, han estat solvents, el cor excepcional, les direcció musical acceptable i el treball de Zurriaga i Diaz Zamora molt bo. Les veus deurien de haver segut millors. La soprano que feia de Rosa, ha segut el punt més dèbil de la producció,
EliminarPerò ja era hora¡¡¡¡¡¡¡¡ I tinc que felicitar als responsables del Palau de les Arts i als que han fet possible esta iniciativa, ja hi ha prou de sempre Verdi, Puccini, etc..Una vegada cada 10 anys una opera d'un valencià amb els millons que fiquem alli dins tots els valencians, per favor, un poc de sensatesa i JA HI HA PROU¡¡¡¡¡ Sols que puc dir que malgrat les deficiències ENHORABONA¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
Efectivamente pienso que no hay que ser chauvinista ni tampoco tener prejuicios ante lo nuestro y es bueno que haya variedad de estilos e incluso no hay porque rechazar de antemano que una obra valenciana pueda ser lo mejor del año... Pero este no será el caso.
EliminarY no creo que se pueda comparar la programación de una ópera catalana al año en el liceu junto a doce o trece títulos más, con el cupo que quiere imponer la consellera en un Palau de Les Arts que representa 5 operas al año
Yo también vengo de Maror y no he sacado las mismas impresiones. Pero mañana haré mi crónica con detalle
Ya podían haber traído a Kaufmann y a Netrebko para la premier de Maror¡¡¡¡
ResponderEliminarY a Barenboim... :'(
EliminarSi es que son unos desconsiderados...
Es diu que Maror será la gran ópera que obrira la temporada 2015 del MET, segon fons consultades. Catala i Lo Rat Penat así lo han afirmat també plens de orgull I valenchiania
ResponderEliminarSí. Galduf ya ha sacado el método Vaughan para repasar su inglés
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